Ya saben que no escribo reseñas, sino recomendaciones. Y aquí va una, el último libro de Aurora Luque, Personal & político.
Me llamó la atención desde el primer momento por la valentía que adelantaba la autora en diversas entrevistas: el saltador pixeleado de la portada iba de cabeza hacia esa cosa indefinible pero familiar a la que llamamos realidad.
Partiendo de notas (de viajes sobre todo) la autora ha generado unos textos de forma variable, adaptada al tema: haikus para hablar de olas japonesas, sonetos para hablar de Ronsard, definiciones para hablar de crucigramas.... La voz y la intención son más críticas y caústicas, pero no menos reflexivas y profundas, que en Carpe noctem o La siesta de Epicuro. Es decir, no se ha sacrificado la trascendencia de la poesía en el altar de la noticia o los "eventos consuetudinarios" de los que hablaba el maestro Machado.
Hay muchos versos magníficos, incisivos y certeros. Hablando, por poner un caso, de la decadencia física provocada por el tiempo, dice:
...y se fue con su paso de catástrofe,
aunque sé que se muda al vecindario.
O comentando el Genji monogatari de Shikibu Murasaki:
...De libros, esos hijos
biológicos del árbol.
Magníficos, por lo valientes, como dije, los poemas dedicados a los rojos autobuses de Alsina, ("esta nave nodriza / tan bronca y nauseabunda /nos acaba acunando como a enormes bebés"), el sarcástico "Temporada de cruceros" :
...De mañana saldrán
cómodos autocars del vientre de las naves
al recinto arqueológico de turno.
Y el más atrevido de todos, por irreverente y contracorriente, escrito en cuaderna vía asonante, a la manera de Gonzalo de Berceo, el "Rap para la romería de Steve Jobs", en el que se describe y glosa la peregrinación de consumidores a las tiendas de Apple el día de la muerte de su fundador.
Un libro entretenido, profundo, divertido, cercano y trascendente a un tiempo, como tienen que ser los libros de verdad.
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